Gianfranco Foschino en Matucana 100
ESFINGES DE HIELO
Galería Concreta | Matucana 100
Curador: Justo Pastor Mellado
Desde el 22 hasta el 27 de agosto
Entrada liberada
“Esfinges de Hielo”: Los misterios del paisaje antártico bajo el lente de Gianfranco Foschino
Los vientos australes, la oscuridad y el frío no son ajenos para el videoartista Gianfranco Foschino (1983). El recuerdo del paisaje que se puede observar desde lo alto de la montaña hacia el Estrecho de Magallanes, en el Club Andino donde aprendió a esquiar junto a su madre, o las caminatas con su padre río arriba o río abajo para pescar desde la orilla, en lo que él llama “un acto consciente de observación de la naturaleza”, se convirtieron en experiencias fundacionales que plasmó en su última muestra “Esfinges de Hielo” que se encuentra en la Galería Concreta de M100.
“Escojo el paisaje austral porque es muy misterioso. Su descripción en novelas y enciclopedias siempre me llamó la atención. He tratado de revelar algunos de sus secretos a partir de mi mirada como observador distante, como un ejercicio de memoria y de lectura de sus formas más íntimas”, asegura Foschino. Y agrega: “Abarcar el paisaje en su totalidad es imposible. Cada lugar está sometido a su propio tiempo y yo soy un artista visual que utiliza la cámara para ser consciente de esto, por eso constantemente estoy en busca de lugares desconocidos y muchas veces alejados de las grandes ciudades con el objetivo de generar registros que den cuenta de estados del tiempo que desconocemos en su particular devenir”.
Foschino, quien estudió Cine en la UNIACC y Diseño en Imagen y Sonido en la Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo de la Universidad de Buenos Aires, es una figura clave en la nueva generación de artistas de Chile, reconocido principalmente por sus videoinstalaciones y video-esculturas; obras a modo de ventanas o umbrales que permanecen abiertos como una memoria latente del tiempo.
En “Esfinges de Hielo”, el artista profundiza -en distintos soportes audiovisuales- las inquietudes del paisaje antártico, una las zonas naturales más inexploradas de Chile, un lugar “meditativo por excelencia” que permite generar un viaje hacia adentro y hacia fuera. “Es un territorio en conflicto y en disputa, que permite observar el pasado de la Tierra y pensar en cómo será el futuro ya que los cambios que experimenta trascienden rápidamente en todas partes del globo. Entonces se trata de un continente madre. La tecnología del video puede transformarse en una herramienta para capturar ciertos aspectos de su esencia y en ello está mi fascinación”, afirma.